PROFESIONALES ESENCIALES COVID_19 

Esta semana leo en Twitter un llamamiento de SalutCat a los profesionales esenciales para vacunar la segunda dosis contra el Covid_19, ilustrando el aviso con una foto de un bombero y dos emoticonos de una supuesta profesora y bombero. Díganme tiquismiquis o mal pensado, pero SalutCat como la GenCat en general continúan ensalzando, de forma sutil y reiterada, a sus funcionarios más afines y fieles a sus intereses.

Después de leer este Twitter, me han revenido pensamientos de las jornadas duras, dolorosas y tristes que viví en las carreteras desérticas de Girona en los días de confinamiento más estricto.

Las escuelas, institutos y universidades cerraron, pues sus docentes se confinaron. 

Las administraciones locales, autonómicas y provinciales cerraron, pues sus funcionarios se confinaron.

Los bomberos y forestales por falta de servicios desaparecieron, dejando servicios mínimos en los parques y estos ni se vieron.  

Miles de mossos desparecieron de los cuadrantes y de las oficinas por ser personal de riego al tener patologías que son compatibles para correr maratones, competiciones de btt o partidos de panel, pero no para patrullar en aquellos días sin ciudadanos, sin tráfico y sin delincuencia en las calles. 

Los delegados sindicales de mossos también se confinaron todos, eso si, congratulándose por la labor de los policías y exigiendo más material de seguridad (máscaras, gel y guantes) desde el sofá de casa activos en las redes para sus demandas. 

En aquellos meses de confinamiento, aplaudimos cada día a las 20:00 horas desde los balcones de las casas a todos los médicos y enfermeras, SEM y también a los policías, reconociendo su valentía por trabajar en penosas condiciones. También hubieron aplausos para otros colectivos, como dependientas de supermercados, gasolineras, limpieza, panaderas... Luego se necesitó al ejercito y aplaudimos a los soldados que nos desinfectaron calles, geriátricos y montaron hospitales de campaña. 

Pero no faltaron las confrontaciones políticas, a las cuales los catalanes estamos lamentablemente acostumbrados. Se necesitó la presencia del ejercito en desinfección y montaje de hospitales de campaña solicitados por ayuntamientos, para que los Bombers, después de ironizar de los soldados por desinfectar calles y hospitales, comenzaran a ser "útiles" en la pandemia, para realizar las mismas funciones que los soldados españoles.

El confinamiento pasó y lentamente volvieron (de forma escalonada y personal) los que ahora se autodenominan TODOS profesionales esenciales. 

Llegaron las vacunas a España y cuando Sanidad lo consideró, los profesionales esenciales (TODOS y TODAS) empezaron a ser vacunados, puntualizo, todas y todos no, la GenCAT dejó de vacunar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en Cataluña, hasta que un tribunal les obligó. 

Hoy al leer el Twitter de SalutCat y ver la foto del bombero, me ha molestado, por el hartazgo de la sobrevaloración reiterada de la GenCat hacia SUS bomberos, obviando a otros colectivos que estuvieron y están mucho más expuestos al COVID. ¿Cuántos bomberos han muerto por el Covid? 

Hoy en las noticias informaban de los cientos de médicos y enfermeras fallecidos en España por el Covid_19, miles en todo el mundo. Relataban casos de profesionales de la sanidad que todo y conociendo que eran de riesgo por sus patologías, no dudaron de estar al pie del cañón ofreciendo su vida por las personas enfermas (no como otros autodenominados profesionales esenciales, que al toque de alarma se escondieron con el salvoconducto de personal de riego) 

HOY, REITERO MI ABSOLUTO AGRADECIMIENTO A LAS VERDADEROS PROFESIONALES ESENCIALES QUE DIERON TODO POR LA SOCIEDAD Y A LOS FALLECIDOS MI ETERNA ADMIRACIÓN, DEP